Escrito por: Miguel Hernández Fernández
A propósito del Día Internacional de las MIPYMES, se celebró en Camagüey (Cuba) el Taller de Gestión de Negocios sostenibles donde asistieron más de 30 participantes para aprender, compartir y celebrar. Este festejo es relevante pues Cuba ya cuenta con casi 4 mil MIPYMES en diversos sectores (construcción, manufactura, servicios informáticos, reciclaje, teneduría de libros, energía renovable, entre otros más). El encuentro estuvo presidido por la Dra.C. Zoila Madiu Quiroga, Coordinadora Provincial de Desarrollo Territorial, la Dra.C. Inés Josefina Torres, Presidenta Provincial de la Asociación Nacional de Economistas y Contadores (ANEC), y la Dra.C. Flor de María Fernández Sifontes, Responsable de Superación de Cuadros en la Universidad de Camagüey.
La conferencia de apertura estuvo a cargo del M.Sc. Enoedis de Jesús Sánchez Rodríguez, Coordinador del Programa de Economía en el gobierno municipal de Camagüey, quien nos compartió su visión sobre los encadenamientos productivos para el desarrollo territorial. Sánchez Rodríguez resaltó la importancia de los documentos y normas jurídicas que establecen la política económica y social del país: la Constitución, los Lineamientos de la Política Económica y Social, el Plan 2030, la Conceptualización del Modelo Económico y Social Cubano, y los Objetivos de Desarrollo Sostenibles. También, compartió que el territorio agramontino cuenta con más de 123 MIPYMES, de ellas 75 son de nueva creación y 47 son reconvertidas de negocios pre-existentes. Hizo hincapié en diferenciar las relaciones de compra-venta con el concepto de encadenamiento productivos, que en ocasiones, se confunden y se pierde el propósito en función de los resultados. Dentro de las problemáticas de la economía actual se hallan “el atraso en el suministro de insumos, materias primas y equipamiento; la falta de calidad de las materias primas; la obsolescencia tecnológica; y las manifestaciones de desconocimiento e incomprensiones de las normas jurídicas por directivos, cuadros y emprendedores”. Resaltó la necesidad de crear cadenas de valor para la generación de bienes y servicios desde el enfoque del desarrollo local sostenible (económico, social y ambiental), teniendo presente que es multiactoral, multinivel y multidimensional.
En otro momento, se expuso la ponencia “Las personas como motor de las empresas”, cargo del M.Sc. Malcom Calvo Llorella, Asesor de Negocios. En su presentación Calvo Llorella hizo mención a los elementos que generalmente se tienen en cuenta para concebir una empresa: un modelo de negocio (repetible y escalable), demanda (clientes), dinero (capital para invertir), aseguramiento de materias primas e insumos, maquinarias y medios, pero muchas veces, se olvidan de lo fundamental: LAS PERSONAS. “Según las estadísticas de cada 10 MIPYMES, 3 sobreviven en el mediano plazo”, resaltó Malcom en su exposición.
Es fundamental conocer el ciclo de crecimiento de las empresas y crecer de manera planificada sin quemar etapas, sobretodo, para no perecer en el llamado “valle de la muerte” (donde perecen la mayoría de las MIPYMES en el primer año de vida). Por ello, se da la paradoja del crecimiento en las empresas: resultados vs complejidad, teniendo presente tres barreras principales: liderazgo, infraestructura escalable, y dinámica de mercado. En el liderazgo enfatizó en la interacción frecuente con los clientes, los competidores y los empleados; la delegación de responsabilidades (soltar y confiar en que otros hagan bien las cosas), definiendo las prioridades, la información para la toma de decisiones desde los indicadores claves de desempeño; la retroalimentación del equipo de trabajo; y el reconocimiento en tiempo y forma (“tratamos con personas, no con máquinas”). Asimismo, se visualizó la importancia de atraer y mantener a las personas correctas en cada empresa como elemento central de la herramienta de las 4E (Equipo de personas, Estrategia, Ejecución, y Efectivo).
“Si quieres construir un barco, no empieces por buscar madera, cortar tablas o distribuir el trabajo, sino que primero has de evocar en los hombres el deseo inmenso de mar libre y ancho”, Antoine de Saint – Exupery.
Mientras que la Lic. Leyna María Méndez Andújar, juristas de profesión, compartió con los asistentes su exposición sobre los derechos y obligaciones de los trabajadores. Remarcó la necesidad de establecer una relación contractual entre el empleador y el empleado por escrito donde se tengan en cuenta las generales del empleado, la fecha de inicio, tipo de contrato, duración, cargo a ocupar y contenido, lugar de trabajo acordado entre las partes, horario, duración de la jornada laboral, régimen de trabajo y descanso, la cuantía de la remuneración y periodicidad de los pagos, las condiciones de seguridad y salud en el trabajo, y la fecha y firma de las partes que formalizan el contrato.
Los empleadores pueden utilizar el contrato por tiempo determinado o para la ejecución de un trabajo u obra; o por tiempo indeterminado, en dependencia de las necesidades de la empresa y los resultados esperados. En cuanto al trabajo a distancia y teletrabajo enfatizó en la viabilidad y posibilidad que está al alcance de los empresarios para la gestión de los recursos humanos.
Por otro lado, la Lic. Helen de Jesús Mora, Asesora de Negocios, expuso los aspectos relacionados con el salario y los tributos asociados desde una mirada contable. Se evidenció la posibilidad que está al alcance de los empresarios de definir las formas de pagos a establecer en las empresas, ya sea pago por tiempo y/o destajo, sin la barrera antigua del salario escala según cargo de trabajo. Destacó la importancia de reflejar todos los datos necesarios a la hora de elaborar la nómina para dejar clara la información a todas las partes interesadas. Asimismo, se pudo visualizar los asientos contables para el registro de la nómina (contabilización del gasto salarial, vacaciones, provisión para subsidio, y los tributos), el pago de los salarios, y el aporte de los tributos.
Para finalizar las presentaciones, se compartió sobre el teletrabajo como una oportunidad para las empresas. Dentro de las ventajas se definieron: la disminución de los costos y tiempo para la transportación laboral; el desarrollo de nuevas habilidades y competencias laborales en el uso de las tecnologías de la informática y las comunicaciones (TICs); la autonomía para la realización del trabajo; la optimización del tiempo en función de los resultados; y la disminución de las interrupciones. Se identificaron algunos para teletrabajar: establecer una relación contractual con la empresa empleadora; definir las funciones, responsabilidades, subordinación y resultados esperados; organizar un espacio del hogar para el teletrabajo con los equipos y medios; establecer horarios de teletrabajo con pausas incluidas; elaborar una agenda con las actividades, horarios, resultados; mantener una comunicación activa, precisa y certera con el resto del equipo; y tener disciplina, puntualidad y presencia.
Dentro de los retos del teletrabajo para los empresarios y empleados se encuentran: contar con pautas de trabajo y canales de comunicación claros y eficientes; trabajar en base a objetivos y no por horas; gestión del cambio positivo; y evaluar herramientas tecnológicas de colaboración eficaces.
Luego al pasar al debate, varios participantes resaltaron la necesidad de realizar estos encuentros de formación y alfabetización en gestión de negocios, la importancia de concebir los negocios y empresas desde la sostenibilidad económica, social y ambiental, el establecimiento de alianzas entre diferentes actores para aportar al desarrollo local desde la gestión de la innovación y la creatividad, y el reto de formar los nuevos profesionales de las ciencias económicas y contables de acuerdos al contexto actual de la economía cubana donde coexisten diferentes formas legales.
El Taller de Gestión de Negocios Sostenibles fue valorado por los asistentes como de éxito y con la mirada puesta en futuros encuentros donde se desarrollen dinámicas que promuevan el beneficio mutuo. Este evento estuvo por el Proyecto de Desarrollo Local Comunidad Colaborativa y Asesores (CoCo) y contó con el apoyo de la Unión de Informáticos de Cuba en Camagüey, la Delegación Territorial de la Cámara de Comercio y el Hub de Economía de Francisco.